La Diputación reduce drásticamente la inversión directa en municipios mientras la oposición propone un modelo alternativo de provincia

La institución provincial ha presentado para 2025 el primer presupuesto de su historia sin necesidad de acudir a crédito bancario, una decisión que está generando controversia por su impacto en la inversión municipal. Mientras el equipo de gobierno celebra la reducción de la deuda hasta el 14,78%, el recorte de 9 millones en la inversión directa a municipios ha provocado que el PSOE presente más de 30 enmiendas por valor de 5,2 millones de euros.

La batalla de las cifras

El presupuesto de 90,09 millones refleja una ligera reducción respecto a los 90,21 millones de 2024. Sin embargo, la verdadera polémica surge en el destino de estos fondos: la inversión directa en pueblos cae de 35 a 26 millones, lo que supone una reducción de más de 100 euros por habitante (de 357,6 a 254,96 euros).

La Diputación justifica esta reducción argumentando una gestión más eficiente y sostenible, destacando que el 43,13% del presupuesto se destina a gastos de personal, incluyendo el nuevo Servicio Provincial de Bomberos. Sin embargo, el portavoz socialista, Máximo San Macario, cuestiona estas prioridades: "No se trata de gastar más, sino de gastar mejor".

El debate sobre Quinta Real

Uno de los puntos más controvertidos es la gestión de los 11,6 millones procedentes de la venta de Quinta Real. La Diputación ha optado por una distribución gradual, argumentando prudencia financiera y mejor aprovechamiento de los recursos. Sin embargo, el PSOE exige que estos fondos se destinen íntegramente a los municipios mediante un Plan Extraordinario de Inversiones. "Si ese dinero salió de los pueblos, debe volver a ellos", argumenta San Macario.

La Diputación presenta nuevos programas específicos con cantidades que la oposición considera insuficientes: 400.000 euros anuales tanto para infraestructuras hidráulicas como para vivienda joven, un millón hasta 2027 para renovación de redes, y cantidades menores para arqueología y suelo industrial.

Frente a esto, el PSOE propone inversiones más ambiciosas: 900.000 euros para un nuevo Parque de Bomberos en Tierra de Pinares, 200.000 euros para cada una de sus principales iniciativas (eliminación de amianto, puntos de recarga eléctrica, empleo para la mujer rural, depuración de aguas), y programas innovadores como el "Erasmus Rural" con 15.000 euros.

Los servicios en cuestión

La distribución del presupuesto revela las diferentes prioridades: mientras Servicios Sociales recibe el 39,55% del total, la partida de Acción Territorial y Asistencia a Municipios se queda en un 22,61%. El PSOE propone reequilibrar estas cifras mediante un nuevo modelo de gestión que incluye la descentralización de los 470.000 euros destinados a actividades culturales y un Acuerdo Marco de Publicidad de 395.000 euros para garantizar la transparencia en las ayudas.

En un gesto poco habitual, San Macario ha reconocido que el PP ha comenzado a incorporar propuestas tradicionalmente defendidas por los socialistas, como las ayudas a vivienda joven o el desarrollo de suelo industrial. Sin embargo, critica que estas medidas "llegan tarde y con dotaciones insuficientes" para abordar los retos de la provincia.

El futuro en juego

El debate presupuestario trasciende las cifras para convertirse en una discusión sobre el modelo de provincia. La apuesta del gobierno por la autonomía financiera choca con la visión socialista de una inversión más directa y descentralizada. En un momento crucial para abordar retos como la despoblación y el empleo juvenil, la provincia se encuentra ante dos modelos claramente diferenciados de gestión y desarrollo territorial.