Desarrollo rural
Lleno absoluto en el taller introductorio a la fermentación de vegetales de Montejo
Vivimos una época donde el cuidado de nuestra salud ha pasado a convertirse en un factor de primerísimo orden. El interés que suscita la nutrición y sus repercusiones sanitarias cada vez es mayor. Como ejemplo de ello encontramos el lleno absoluto del pasado sábado del taller organizado por CODINSE sobre fermentación de productos vegetales en la Casa del Parque de las Hoces del Río Riaza en Montejo de la Vega de la Serrezuela. La entidad tuvo que limitar la participación debido a la gran demanda que hubo tras la publicación del mismo.
El taller está subvencionado por la Junta de Castilla y León con cargo a la asignación tributaria del 0,7% del IRPF y Sociedades y fue impartido por Mónica Ibáñez de Experiencias Sanare, una profesional del ámbito nutricional que sugiere la regeneración de la salud mientras se reconecta con la naturaleza. Partiendo de esa premisa, el taller sobre fermentación de productos vegetales estuvo planteado como una introducción a un mundo extremadamente diverso y complejo. Debido a que la fermentación se lleva a cabo gracias a bacterias inocuas para el organismo, este tipo de preparación de alimentos genera un aporte extra para el cuidado de la microbiota. Este aspecto nutricional es un añadido al hecho de que la conservación por fermentación permite un eficiente aprovechamiento de los productos provenientes de huertos particulares. Los excedentes que estos huertos generan en numerosas ocasiones son desechados. Gracias al taller impartido por Mónica Ibáñez, los asistentes tendrán de aquí en adelante un surtido abanico a su disposición de técnicas de conservación de prácticamente cualquier producto vegetal, pues según la divulgadora en el taller éstos métodos de conservación por fermentación hacen que casi cualquier vegetal sea susceptible de ser conservado, ampliando su fecha de consumo y aprovechamiento.
El taller además del contenido teórico contó con una clase práctica donde se llevó a cabo fermentación salvaje en salmuera. Mónica Ibáñez también trajo al taller una degustación de diferentes productos anteriormente puestos en conserva por ella misma como remolacha, zanahoria y lombarda, recordando a los alumnos también las propiedades del Kvass de remolacha como un producto ideal para tomar en estas fechas de excesos debido a que sus características lo hacen ideal para combatir las resacas, así como para mejorar la digestión. Se percibió un notable interés, con una rueda de preguntas final bastante extensa. Hablando con una de las asistentes al curso, nos comentaba que lo había encontrado “un curso interesante, porque me ha dado a conocer otra forma de comer vegetales y de aprovechar los productos del huerto; igual que me parecen interesantes los muchos beneficios que tiene este tipo de conservación para nuestro cuerpo”.