Abre sus puertas
Una taberna con aperitivos de siempre en la villa de Riaza
¿Por qué inventar la rueda si ya la tienes? Muchas veces nos empeñamos en innovar, cuando lo que funciona es lo de toda la vida.
Ésa es la filosofía de Óscar, un madrileño que empezó a venir a Riaza casi por casualidad, y que sin darse cuenta ha cumplido cuatro años en estas tierras castellanas. Enamorado de la montaña, decidió instalarse aquí y buscar una manera de ganarse la vida.
Buen conocedor del negocio de la hostelería, sector en el que ya había trabajado, empezó a buscar locales para montar su propio espacio. La Taberna de Óscar abrió al público a principios de este verano y desde entonces ha sido un no parar.
Abrí deprisa y corriendo - afirma - porque si esperas a tenerlo todo no ves el momento. El acondicionamiento del local le he hecho yo solo; me he dedicado al sector de las reformas muchos años (y todavía sigo entre semana) y eso me ha permitido poner el local a mi gusto. Eso sí, con muchísimo esfuerzo y echando un montón de horas. Todavía faltan detalles por terminar, pero se van haciendo poco a poco.
De momento no puedo quejarme; hay muchísimo trabajo y la acogida por parte de la gente ha sido fantástica. Les estoy muy agradecido por la confianza depositada en mí, tanto a los clientes como al resto de establecimientos de Riaza, la relación es muy buena.