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"Una vez fueron el centro de la Península": el nordeste de Segovia, clave en la prehistoria por el uso de las centellas
La conferencia celebrada el pasado viernes sobre "Nuevas investigaciones arqueológicas y geológicas sobre las sillimanitas de la Somosierra", fue impartida por Carlos Rodríguez Rellán y Juan Cárdenas Párraga, de la Universidad de Granada (UGR), y David García González, de la Estación Experimental de Aula Dei (EEA-CSIC).
Durante la charla, los investigadores
presentaron descubrimientos recientes que demuestran que la sillimanita de esta zona fue utilizada en la fabricación de hachas prehistóricas, algunas de las cuales han aparecido en yacimientos tan lejanos como Andalucía o Francia. Estos hallazgos revelan la existencia de redes de intercambio entre comunidades distantes en épocas remotas.
Juan Cárdenas Párraga destacó la singularidad de este mineral: "La sillimanita se da en pocos puntos de la Península y tan grandes solo se han encontrado en esta zona".
Carlos Rodríguez Rellán subrayó la relevancia histórica: "La gente de esta zona debe saber que una vez fueron el centro de la Península. Durante la Prehistoria este lugar sirvió de fuente y probablemente de lugar de fabricación de hachas, lo cual es extraordinario". Además, añadió que "topónimos como Cerezo de Abajo o Horcajuelo son conocidos a nivel mundial por los yacimientos, en este caso de sillimanita".
A las 18:30 horas tuvo lugar un taller de arqueología experimental dirigido por Javier Llamazares González (UGR), donde los asistentes pudieron experimentar el proceso tradicional de fabricación de hachas pulidas de sillimanita, comprendiendo la enorme habilidad y conocimiento técnico necesarios para trabajar esta roca.
Del pasado prehistórico al siglo XX
La jornada también puso de relieve el valor etnográfico de la sillimanita en tiempos recientes. Durante las décadas de 1950 y 1960, vecinos de los pueblos del nordeste segoviano recogían estas piedras para venderlas y obtener unas pesetas extra, en un proceso que recuerda a la explotación de este mineral miles de años antes.
David García González destacó: "Investigadores de toda España, de Francia y Portugal quedaron fascinados con la historia de la recogida de las centellas en estos pueblos en el siglo XX. No conocemos un fenómeno similar y queremos poner nuestro granito de arena en dejar esta parte de la historia de España documentada".
Este paralelismo entre la Prehistoria y el siglo XX resalta cómo la sillimanita ha sido, a lo largo de los siglos, un recurso con un papel clave en la vida cotidiana y en la economía de las comunidades locales.
El evento, que contó con una gran participación, fue organizado conjuntamente con la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón y contó con la colaboración de la Universidad de Granada, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y el Ayuntamiento de Cerezo de Abajo, con el apoyo de la Junta de Andalucía y fondos europeos de investigación.